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Sumérgete en un viaje fascinante por las riquezas naturales y reservas de agua del país de la belleza, páramos y parques naturales que te sorprenderán.
¿Sabías que el país de la belleza es considerado potencia hídrica mundial? Aquí encontrarás seis nevados, 44 % de los páramos de Sudamérica, cinco vertientes hidrográficas, 30 ríos grandes, 1.277 lagunas y 1.000 ciénagas. Por ello resulta tan importante su conservación, ya que el valor del agua representa la posibilidad de vida para todos los seres de la tierra. Además, el equilibrio y salud de los ecosistemas dependen de ella. Por otra parte, según un artículo del Ministerio de Ambiente, el país cuenta con el 50 % de los páramos del mundo, principales reservas de agua. Sin embargo, muchos de estos recursos son aún desconocidos. Por eso, te invitamos a explorar algunas de las reservas de agua de Colombia, que juegan un papel fundamental en el equilibrio ecológico y el sustento de la vida en el país.
Ubicada al norte de Colombia sobre la Costa Caribe y a solo 42 km de las playas de Santa Marta, se encuentra La Sierra Nevada de Santa Marta, la montaña más alta del mundo. Allí se hallan todos los pisos térmicos: desde la calidez de las playas hasta las nieves perpetuas de cuyo deshielo nacen lagunas y ríos, a 3.000 metros sobre el nivel del mar. Esta montaña hace parte de una cordillera colombiana en donde se encuentran innumerables en donde se encuentran innumerables ríos, además de monos aulladores, donde juntos cantan la banda sonora de la Sierra que fue declarada Reserva de la Biosfera y Patrimonio de la Humanidad en 1979 por la UNESCO, debido a la red de ecosistemas que albergan innumerables formas de vida y que son hogar de varias comunidades indígenas. Este santuario de biodiversidad es crucial como reserva hídrica, debido a que sus numerosos ríos y arroyos alimentan cuencas hidrográficas que abastecen a comunidades locales y diversos ecosistemas. Sin duda alguna, es un recurso valioso para la región y el país por su inmensa riqueza natural.
Entre frailejones, musgos y líquenes se encuentra el Páramo de Ocetá, un refugio natural ubicado en la cordillera Oriental, en el departamento de Boyacá. En este páramo se hallan cascadas, manantiales y animales como venados de cola blanca y cóndores, que adornan un lugar totalmente bello y diverso. Y es que caminar por sus senderos, respirar su aire y conocer su deslumbrante vegetación es adentrarse en lagunas colombianas y cascadas que lo convierten en un recurso hídrico crucial para almacenar y regular el agua. Además, el Páramo de Ocetá actúa como esponja natural que absorbe la humedad de la atmósfera y la lluvia, almacenándola en su suelo y vegetación. Por otra parte, los frailejones que crecen en este lugar son vitales para el departamento y alrededores, porque abastecen la fuente hídrica que baja desde Boyacá hacia el Orinoco. Indudablemente, la conservación de este ecosistema es esencial.
El Parque Nacional Chingaza es una joya natural y cultural del centro de Colombia. Allí la magia de las montañas guarda secretos y pensamientos heredados de los Muiscas y los Guayupes, así como de comunidades campesinas que habitaron la región hace más de 40 años. Este lugar cuenta con ecosistemas predominantes como los bosques alto andino, subandinos y páramos colombianos, los cuales son refugio de la majestuosa fauna y flora que allí habitan. Además, abastece el 80 % de agua potable de Bogotá y municipios cercanos. Por eso, su conservación es esencial para garantizar la continuidad de su aporte tan vital. Definitivamente, el Parque Nacional Chingaza es un santuario de biodiversidad y un testimonio de la historia de la región. Por ello, protegerlo y cuidarlo es un compromiso de las generaciones presentes y futuras, así como un acto de gratitud hacia la riqueza hídrica y natural que nos brinda.
Entre los departamentos de Norte de Santander y Santander existe una maravilla geográfica, llamada el Nudo de Santurbán, compuesto por una amplia región natural de ecosistema montañoso hipertropical. Este lugar se destaca por su diversidad de fauna. Entre otras cosas, tiene una gran importancia ecológica, al ser el nacimiento de varias reservas de agua que abastecen de agua potable a las poblaciones y ciudades de estos departamentos. Santurbán es un sitio estratégico como reserva natural y zona de recarga y regulación de agua. Además, es clave para el desarrollo regional de los departamentos de Santander y Norte de Santander, ya que 48 municipios se abastecen del agua del páramo, beneficiando a una población aproximada de 2.3 millones de personas. Alrededor del páramo también hay diferentes lagunas, diversidad de flora y riqueza en musgos, que son un colchón importante para regular el agua en las cuentas hidrográficas de los departamentos. Evidentemente, su importancia hídrica tiene un impacto significativo en la calidad de vida y el desarrollo regional. No cabe duda de que la riqueza hídrica del país de la belleza está presente en cada rincón. Estos ecosistemas no solo son fuente de agua dulce para millones de personas, sino también refugio de una biodiversidad única de Colombia ¡Cuídalos y protégelos!
Importancia de los humedales en Colombia
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