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La cultura precolombina en Colombia y la filigrana momposina son la inspiración para la nueva colección de joyería de la famosa marca Missoma.
Colombia es un país que sin duda alguna ha sido fuente de inspiración para muchos artistas y marcas a nivel internacional. Hoy en día, el boom de la industria de la joyería está marcando una tendencia importante en el mundo de los accesorios. Muestra de ello es Momposina, la nueva colección de Missoma, la exclusiva marca de joyería londinense. Sus últimas creaciones, fueron inspiradas en técnicas milenarias como la filigrana Momposina y la cultura precolombina.
La filigrana Momposina es un arte que sin duda ha llamado la atención de muchos turistas locales y extranjeros como Kate Horne, la reconocida realizadora audiovisual y documentalista radicada en Reino Unido. Horne, quien desde su infancia tuvo un acercamiento importante con la cultura colombiana, decidió motivar a su amiga Marisa Hordern –fundadora y directora creativa de Missoma– a una aventura para descubrir los tesoros de la técnica de la orfebrería en Colombia.
Una travesía que empezó con una visita al Museo del Oro en Bogotá, donde Marisa tuvo la oportunidad de conocer a fondo la historia, el legado y las piezas que dejaron las culturas precolombinas de Colombia. Inspiración que sin duda se ve reflejada en la colección que se creó a partir de este viaje.
"Visitar el museo en Bogotá, y apreciar la complejidad de los diseños en vivo, fue realmente especial para mí. La exposición contempla algunos de los antiguos artefactos y joyería más asombrosos que he visto. Más que replicar, mi interés se concentró en celebrar Colombia. Por esta razón, me enfoqué en los colores y las texturas del país, añadiendo pequeñas notas que resuenan con Missoma", comentó.
La segunda parada de esta aventura fue en Mompox, específicamente en la Fundación Escuela Taller. Un espacio creado para fortalecer los procesos formativos en oficios tradicionales relacionados con el patrimonio local, como la orfebrería, alfarería, ebanistería y la cocina entre otros.
Doris Peñaloza, quien estudió y aprendió el oficio de la filigrana en la Fundación y propende por la preservación de este arte, recibió a Marisa y a Kate en la Escuela Taller para enseñarles la técnica milenaria de la filigrana Momposina.
Marisa tuvo la oportunidad de compartir con los artesanos y joyeros para conocer a fondo y experimentar por sí misma el arte de la orfebrería en esta región. Fue tal su fascinación por esta cultura, que junto con Doris diseñaron una pieza icónica dentro de la colección: un dije con forma de piña, hecha en filigrana por los artesanos del taller, y cuya venta será donada en su totalidad a la preservación del oficio de la filigrana.
“Escogimos la piña porque representa el espíritu vibrante y tropical de Colombia que experimentamos durante nuestro viaje. La primera locación en la que grabamos fue en un barco lleno de piñas, entonces sentí que era lo más adecuado” mencionó Hordern.
La colección, que se lanzó en la página web www.missoma.com, está compuesta por 40 piezas, de las cuales 15 son aretes, 16 collares, 3 brazaletes y 6 anillos. Momposina está inspirada no solo en la historia de Mompox y las raíces históricas de la ciudad, sino en la complejidad y el detalle icónico de las artesanías colombianas, herencia de la época precolonial.
Los colores de las piedras que componen los diseños de la colección están inspirados en los colores de los atardeceres de Mompox y Cartagena, que según Hordern, se sienten como ‘sacados de una pintura’.
De esta forma, el diseño de sus piezas pretende honrar las raíces auténticas y las tradiciones orfebres que hoy son patrimonio de la nación.
La realización de la campaña fue producida por Milagrosa Producciones, de la mano de la directora Daniela Riascos. El equipo siguió fielmente los pasos de Kate y Marisa en esta aventura, en la ciudad que ha inspirado a tantos artistas.
Finalmente, Hordern expresó que su viaje ha inspirado a que muchas personas consideren Colombia como su próximo destino. Comentó que la razón por la cual encontró tanta inspiración fue por la riqueza cultural, arquitectónica y creativa del país, y agregó: “Colombia es un país naturalmente hermoso con una gran energía que se ve reflejada en su gente”.
Mompós o Mompox (Sí, ambas denominaciones son válidas) es un distrito en Colombia ubicado al norte del país, más específicamente en el departamento de Bolívar, a unos 248 kilómetros al sur de Cartagena. Esta ciudad también comparte el título de ser Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad por la UNESCO.
Gracias a su aislamiento de la zona costera colombiana, y debido a su difícil acceso, Mompox se caracteriza por ser “el pueblo donde el tiempo se detuvo”. Sin embargo, al encontrarse ubicado a orillas del Río Magdalena, fue el lugar ideal para guardar el oro y la plata que los españoles sacaban de las minas de Antioquia durante la época de la conquista.
La historia de la filigrana en Colombia se remonta justo a esa época. Con la llegada de los españoles, llegaron también los artesanos sevillanos, reconocidos por haber heredado diferentes tradiciones árabes. Entre esas, la habilidad de convertir los preciados metales en hilos de oro y plata para la fabricación de lo que hoy se conoce como el arte de la filigrana.
Es precisamente en ese legado que empezó a transmitirse este conocimiento de generación en generación durante siglos. De ahí surgió la respuesta a la aclamada pregunta: ¿qué es la filigrana Momposina? Una práctica a la que también se le conoce como el arte de tejer hilos de plata y convertirlos en figuras únicas e irrepetibles, que asemejan formas orgánicas similares a las que se encuentran en la naturaleza.
Este viaje representó una aventura sin igual para Kate y Marisa, quienes experimentaron de primera mano algunos de los lugares que hacen de este país un destino único. Su travesía es una invitación para todas las personas que desean descubrir los tesoros que se aguardan más allá de un taller orfebre.
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