En Colombia existen pueblos tradicionales que enamoran por su riqueza arquitectónica, su historia y cultura. Anímate a vivir una experiencia única de turismo y descubre las maravillas del país recorriendo sus calles y paisajes.
Nuestro país está lleno de lugares mágicos que hacen de Colombia un destino turístico ideal para vivir nuevas experiencias y tener un viaje inolvidable. Sus pueblos patrimonio, son un ejemplo de esos lugares que logran cautivar a los viajeros por su esencia, su cultura, sus atracciones y su estética en general. A continuación te dejamos con una selección de lugares poco conocidos que también hacen parte de los pueblos patrimonio de Colombia. (También puedes leer: Cuatro destinos para convivir con los indígenas)
Las calles empedradas y las casas antiguas que conforman Monguí, relatan la historia de un pasado indígena y colonial que le dio la vida a este lugar y lo llevó a convertirse en el pueblo más hermoso de Boyacá. Foto: Martha Rivero Monguí es reconocido por su tranquilidad y la hospitalidad de sus habitantes. Este lugar es ideal para conocer la historia de Colombia y ofrece muchos planes para sus visitantes como las caminatas por el puente de Calicanto que atraviesa el río Morro, los recorridos por la Basílica de Nuestra Señora de Monguí y las visitas guiadas al Páramo de Ocetá. También puedes disfrutar la deliciosa gastronomía típica boyacense y deleitarte con un mondongo, un ajiaco, una mazamorra chiquita o la tradicional changua.
¿Cómo llegar? Este pueblo está ubicado a 231 kilómetros de Bogotá y a 93 kilómetros de Tunja. Para llegar desde Bogotá debes tomar la Autopista Norte y conducir por toda la ruta que va hacia Tunja, pasando por Paipa, Duitama y Nobsa hasta llegar a Monguí. Este recorrido toma alrededor de 3 horas y media.
Este lugar es reconocido como el pueblo de los parques, pero su verdadero atractivo es la conservación de su arquitectura tradicional que ha perdurado desde 1825. Foto: Anghelo Bernal Quienes visitan Salamina tienen el placer de admirar la cultura cafetera y conocer sus lugares turísticos más reconocidos como la Basílica Menor de la Inmaculada Concepción y el monumento La Pila. Además, este pueblo también encanta a sus visitantes por medio de su gastronomía con platos como el mondongo, el sancocho, la mazamorra y la bandeja paisa.
¿Cómo llegar? Para ir a este pueblo, primero debes llegar a Manizales. Desde allí te diriges al terminal de transporte y tomas un bus para Salamina que hace un recorrido aproximado de 2 horas. Si vas en carro particular toma la ruta desde Manizales, que pasa por Neira y Aranzazu, hasta Salamina. (También puedes leer: De Bogotá a Yopal, atravesando Boyacá)
El lugar lleva este nombre gracias a sus calles empedradas y al hermoso paisaje que brindan sus casas, todas pintadas de blanco con balcones y puertas rojas, que crean una apariencia muy similar a la de un pesebre de navidad. Foto: Wikimedia Este pequeño pueblo, además de encantar a su visitantes por su estética, conserva uno de los tesoros más importantes y antiguos del país. Se trata del Parque Natural Los Estoraques, una reserva natural que se ha conservado por más de cuatro millones de años y que se considera como el principal atractivo turístico del municipio. En este municipio puedes disfrutar de una gastronomía única donde resaltan el ajiaco ocareño y la sopa de fríjol, con costillas de cerdo o res, plátano y ruyas; pero si lo tuyo es el dulce, puedes probar los postres típicos como las brevas en almíbar, el arequipe con café, las cocadas y las panelitas de leche. ¿Cómo llegar? Para visitar este pueblo debes llegar a Cúcuta y desde allí tomar un bus hasta Ocaña. Este recorrido te tomará 6 horas, y una vez llegues a Ocaña debes coger otro bus hasta La Playa de Belén. Este recorrido dura aproximadamente 45 minutos.
Este mágico lugar está ubicado en medio de la Sierra Nevada de Santa Marta y el mar Caribe y ofrece a sus visitantes diferentes atractivos turísticos como los pueblos palafitos de la Ciénaga Grande, el monumento a la Leyenda del Caimán, las Torres de Cataca, la Hacienda Papare y el Centro Histórico de Ciénaga. Foto: :)Gab(: Además, este lugar ofrece deliciosos platos típicos como el arroz de camarones, el guineo con queso, el sancocho de chivo, el sancocho trifásico y una amplia variedad de pescados.
¿Cómo llegar? Para llegar a este pueblo debes tomar un avión hasta Santa Marta y allí coger un taxi que te dará un recorrido de 25 minutos hasta Ciénaga. (También puedes leer: Más realismo mágico por descubrir y visitar en Colombia)
Este pueblo se ha convertido en uno de los más bellos de Antioquia gracias a sus paisajes, su cultura y su arquitectura donde resaltan las casonas tradicionales de la época de la colonia. Foto: Iván Erre Jota Jericó es una tierra tranquila de costumbres religiosas y por esta razón sus principales atractivos turísticos son la Catedral de Nuestra Señora de las Mercedes, el santuario del Inmaculado Corazón de María y la iglesia de San Francisco. Otros puntos de interés son el parque ecológico Las Nieves, la Plaza de Bolívar y el Parque Reyes. Dentro de su gastronomía se destacan los “postres jericoanos”, entre los que se encuentran dulces típicos artesanales como el manjar de frutas, los bizcochuelos empapados en vino y ron, las luisas (galletas asadas con miel y panela) y los bombones de cardamomo, entre otros.
¿Cómo llegar? Jericó está ubicado a dos horas de Medellín y se puede llegar tomando la vía La Cabaña que atraviesa Medellín, Caldas, Fredonia, Puente Iglesias y Jericó. Este recorrido tiene 123 kilómetros y dura aproximadamente 2 horas. ¿Estás listo para descubrir la magia de los pueblos patrimonio de Colombia? Anímate, disfruta de un viaje increíble y déjate empapar por la cultura, el cariño y la alegría que caracteriza a los colombianos.