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En Colombia hacemos de todo con banano: postres, ensaladas, bebidas, snacks, compotas, salsas, aderezos y un largo etcétera más. No podríamos terminar la lista por la misma razón que no podríamos decir todo de la fruta más dulce de nuestra tradición.
En Colombia hacemos de todo con banano: postres, ensaladas, bebidas, snacks, compotas, salsas, aderezos y un largo etcétera más. No podríamos terminar la lista por la misma razón que no podríamos decir todo de la fruta más dulce de nuestra tradición. Detrás del banano existen mil historias narradas y otras miles por narrar. Y es que esta no es sólo una fruta; más bien, es un manifiesto de lo que somos y lo que hemos sido, de nuestras luchas y logros campesinos.
El banano lo es todo: es alegría e historia, tradición y presente. Somos unos duros cultivándolo y exportándolo al planeta (contamos con la dicha de ser los cuartos productores a nivel mundial). Nuestra fruta desfila por las estanterías de las plazas y los supermercados de todo el mundo. Es un manjar natural del que nadie escapa y, por eso, queremos que conozcas algunas recetas que no pueden faltar en la dieta de los colombianos.
Te aconsejamos ir a la tienda o mercado más cercano. Consigue tus bananos: sabemos que, una vez termines de leer, te asaltarán unas ganas increíbles de preparar uno de estos platos. ¡Alista las ollas y el horno desde ya!
¿Cuántas veces no escuchamos a nuestros padres decir que tocaba comerse el banano antes que se pusiera “pintón”? Seguro muchas veces. Estaban los que lo comían sin agüero; otros, sin embargo, preferían buscar una opción intermedia. En estos casos, lo mejor era escuchar la sabiduría de nuestras abuelas: “¡Mijo, tranquilo! Hagamos una tortica”, y santo remedio. La torta de banano es el manjar perfecto para cuando la cáscara está negra. Una delicia de nuestra cocina tradicional colombiana.
Sin entrar en detalles, la preparación de esta torta es bastante sencilla. Se trata de mezclar el banano maduro, queso mozarela o quesillo, aceite, azúcar, harina de trigo, bocadillo y huevos (aunque, eso sí, cada casa tiene su receta particular). Tras machacar varios de los ingredientes y revolverlos hasta que la mezcla sea consistente, la torta va al horno o al fogón durante aproximadamente 30-40 minutos. Si quieres que la receta tenga el toque de calidad colombiano, recuerda introducir el cuchillo en la refractaria o la olla para comprobar que la torta esté bien horneada o cocinada, dependiendo el caso. Si al retirarlo ves que la hoja está untada de alguno de los materiales, falta un poco más de tiempo de cocción.
¿Quieres saber cuál es el postre más fácil de preparar de todo el mundo? Nosotros también. Sin embargo, creemos estar cerca de la respuesta: se trata del postre de banano en leche, una de las alegrías más apetecidas de los comensales colombianos.
Si la torta de banano es sencilla de realizar, esta receta lo es aún más. Descresta a tus amigos y familia con esta maravilla. Primero, consigue unos bananos maduros (aunque se pueden utilizar también los de cáscara negra, aconsejamos unos un poco más pintones). Pela su cáscara y deposítalos sobre una sartén, un plato o una refractaria: todo depende de cómo quieras prepararlos, pues puedes hacerlos al fuego, al horno y hasta en microondas. Tras esto, sólo debes verter un poco de leche sobre los bananos (la idea es que estos queden bañados por ella) y ya de ahí en adelante todo va en el chef: si quieres espolvorear un poco de canela en polvo, o usar azúcar, panela o bocadillo. En fin, lo que quieras. El fuego o el calor hacen lo suyo y, tras muy poquito tiempo (un minuto o dos, dependiendo del calor), los tenemos listos.
La sorpresa de banano combina dos deidades de la cocina: el banano y la tocineta. Acompañado por bocadillo, la cosa sabe aún mejor. Más que un postre, esta receta es un baile de sabores que puede servir de pasabocas o entrada. Aquí, como siempre pasa cuando hablamos de banano, dejamos que hablen los expertos de Uniban, los maestros del cultivo de banano y sus preparaciones.
La idea es sencilla: debemos retirar el núcleo o centro del banano para introducir un poco de bocadillo dentro de ellos. Luego, tan sólo recubrimos la fruta con tocineta y la llevamos al horno. Al cocinarse la tocineta, tenemos lo que queremos: una exquisites que combina lo mejor de lo salado y lo dulce. ¡Y a comer!
¡Cuidado! Si tienes así sea una pizca de hambre, lee lo que sigue bajo tu propia responsabilidad. Que conste que te alertamos, pues estamos por hacer una pequeña enumeración de todos los platos que involucran estos dos amigos entrañables: helado de banano, Banana Split, ensalada de frutas con helado, crema de banano y helado, y un etcétera que ya nos tiene soñando. Más que decirte cómo preparar alguno de estos platos, nos gustaría que fueras donde los que más saben: nuestros heladeros y fruteros de confianza. Porque en cada esquina y calle principal de nuestros barrios y pueblos encontrarás una para tu deleite, te dejamos en manos expertas. ¡Por favor, no olvides probar la mezcla más querida: banano, queso y helado!
En Colombia no tenemos secretos. Nuestro éxito en el ciclismo de montaña se debe, en buena medida, al bocadillo y el banano. Sobre este último, hemos visto a nuestros cracks pedalear mientras comen un poco de la fruta; aunque no descartamos que también la consuman como batido. Esta bebida es una de las más queridas por los ciclistas de nuestro país en medio de las duras travesías por nuestros altos de montaña. Para nadie es un secreto que el banano, como buena fuente de potasio y azúcar, ayuda a mitigar calambres o problemas musculares.
Aunque la base de esta receta es sencilla (banano licuado en agua o leche), aquí te dejamos una que no te dejará indiferente. Uniban conoce cómo complementar mejor que nadie el sabor de esta fruta. No por nada por cada 100 bananos que se consumen a nivel mundial, 4 surgieron de sus cultivos.
¿Has probado a mezclar banano en tu receta tradicional de galletas? Si no lo has hecho, ¡no lo dudes más! Es una maravilla como ninguna. El banano añade una cremosidad y dulzor que pocas frutas pueden alcanzar. No es hostigante, para nada; incluso, si quieres puedes sustituir el azúcar por este dulce natural. Acá en Colombia solemos acompañar esta delicia con un café bien cargado.
No queremos antojarte más: créenos, fue muy difícil contarte sobre esto sin que las ganas de comer uno de estos platos no nos invadiesen. A pesar de que existen varias recetas más, dudamos que hayas leído este texto de corrido sin detenerte a soñar con una de estas preparaciones. Como dicen los chefs, ¡buen apetito!