¿Sabías que un proyecto colombiano ha recibido más de cinco premios internacionales en diseño? El artífice de la historia es Carlos Arturo Torres, un joven que después de terminar sus estudios de pregrado en el país viajó a Suecia para hacer una maestría y, como proyecto de grado, creó una prótesis para niños con discapacidad que puede ser armada con fichas de Lego.

 Marca País Colombia habló con él sobre el proyecto, que ya tuvo un primer acercamiento a la realidad con un niño de la Fundación Cirec, y sus planes de expandirse a todo el mundo.  

Carlos Arturo Torres

¿Cómo inicia en el diseño de productos? 

Mi trabajo consiste en desarrollar conceptos a futuro. Yo soy, de alguna manera, un diseñador conceptual, que genera visiones de lo que un producto puede llegar a ser, partiendo de una necesidad básica. Luego planteo conceptos que se tienen que volver tangibles en un diseño, un modelo o un prototipo. 

¿Y ahí surgió el proyecto de la prótesis? 

El proyecto ocurrió en medio de la maestría en la Universidad UMEA. La mía fue en el departamento de investigación de LEGO en Dinamarca. Empecé a darme cuenta de todo lo que se podía hacer con los bloques de LEGO y descubrí que es una herramienta social: encuentras amigos, exploras cosas y aprendes. 

Quise experimentar en ese campo: usar esas dinámicas sociales para borrar de alguna manera el asunto de la discapacidad. En mi cabeza siempre estuvo latente la idea de las personas amputadas y pensé en entregarle las mismas capacidades de cualquier persona a los niños que por alguna razón habían sido amputados. 

Además quería hacer algo por mi país. Ya conocía la Fundación Cirec, que trabaja con personas en condición de discapacidad, y al mismo tiempo entendí que la rehabilitación no es solo colocar una prótesis: incluye un montón de aspectos en la parte sicológica y social. 

¿Y cómo contactó a Cirec? 

Estuve de vacaciones en Colombia y conocí a Daniel Gómez, el director de la fundación. Hablamos del proyecto y me ofreció capacitación para saber qué es una prótesis y entender cómo es el proceso de rehabilitación de un niño discapacitado. 

Carlos Arturo Torres (Diseñador), Lina Herrera (Fundación Cirec), Camilo Carvajal (Publicis Colombia)

¿Cómo funciona la prótesis? 

Todas las prótesis son módulos que después quedan fijos. Lo que hice fue separar la prótesis en módulos más eficientes: uno que se comunica con el muñón y tiene sensores que llegan a un módulo operativo, llamado músculo, y el cual funciona con un motor de LEGO Mindstorms. El tercer módulo estuvo pensado para tener una mano funcional y una estética que rompiera con lo convencional. 

Diseñé una ficha específica que interactúa además con todo el sistema LEGO, así puedes crear múltiples opciones de prótesis con sets del juego ya creados y que funcionan perfectamente. ¡Si quieres puedes hackear el Bati-móvil y ponértelo en el brazo!

Prototipo de la prótesis de Carlos Arturo Torres

 ¿Por qué una prótesis para niños? 

Porque las prótesis tradicionales no están hechas para el tamaño de los niños, son pesadas y no tienen una estética con la que se sientan cómodos. Además, ellos encuentran la forma de hacer las cosas sin brazos. Las de las piernas todos las usan porque marca la diferencia en si caminas o no. Pero eres funcional sin el brazo. Se necesita un esfuerzo muy grande para que la usen todo el tiempo. 

Le cambia la vida al niño… 

¡Y desde muchos puntos de vista! El niño se siente más seguro en sus habilidades cognitivas: no se trata de lo que puede hacer sino de lo que puede crear. Es sobre todo darle el control al niño de decidir cuándo quiere que sea funcional y cuándo quiere explorar. 

Además las interacciones sociales son más interesantes. Se puede pensar en hacer ferias de ciencia en instituciones educativas y pedir que entre todos generen contenido a partir de LEGO para un compañero discapacitado. 

Uno de los modelos creados por Torres, probado en Colombia.

 ¿Cómo fue la prueba del prototipo en Colombia? 

Creamos dos sets: una excavadora y una nave espacial. La idea de la excavadora es que fuera difícil para probar la interacción con la gente que estaba alrededor. Le mostramos cómo podía ser la prótesis y le planteamos el reto. Empezó a armarla y se comprobó una de las dinámicas que quería ver sobre los roles en cuanto al juego de LEGO: para que fluya debe haber un líder y un niño con discapacidad nunca ocupa ese puesto. ¡Aquí sí! Todos querían colaborar… Cuando terminamos fue una realización ver que se lo podía poner en el brazo. ¡No lo podía creer! 

Cuando armamos la nave invitamos a un amigo de Darío (el niño de la investigación) sin discapacidad. Le preguntamos qué pensaba de Darío y solo habló de la discapacidad. Hicimos la nave espacial y le pregunté qué pensaba cuando terminamos. Solo dijo: ¡yo quiero una de esas! Se le olvidó la discapacidad y solo pensaba en la máquina. 

Primer niño en probar la prótesis creada por Torres.

¿Cuál es la siguiente fase del proyecto? 

Tenemos varios pasos a seguir: el prototipo que tenemos hasta ahora es el 0.5, por llamarlo de alguna forma. A diciembre pensamos llegar al 1.0, sin cables y con un control remoto para que puedan interactuar más con la prótesis. Necesitamos muchos recursos para llegar al 2.0 e implementar sensores biométricos; y la 3.0 es la que está casi lista para producción y comercialización, después de validar muchas cosas, con diferentes prótesis alrededor del mundo. 

¿Cómo ha sido la respuesta de la gente? 

El proyecto ha estado en portales como el Wired y The Guardian, hemos recibido cinco premios en Diseño de Producto y llegué al Index Award, al lado de proyectos de talla mundial. Todo eso es muy importante porque le da confianza al inversionista. En el Maker Faire de Nueva York, LEGO tiene el espacio más grande y el proyecto va a estar ahí. La idea es que podamos compartir la ficha que diseñé con la comunidad global, poner las instrucciones en Internet y que los niños puedan bajarlas y ponerlas a funcionar. 

¿Qué quiere con el proyecto?

 Llegar a un mercado global. Cuando lo presenté en Future Lab (LEGO) y en Cirec quería conseguir fondos para desarrollar el proyecto. Por ahora es solo un prototipo. Primero debemos terminarlo y dárselo a Darío. 

Como colombiano, ¿por qué cree que el proyecto ha sido exitoso?

 ¡El colombiano es recursivo! Con los presupuestos que he manejado hemos hecho maravillas. (Risas). Y somos sensibles: a pesar de que hay gente consciente de todo lo que pasa en el mundo, he encontrado que es en Colombia en donde realmente somos sensibles a las emociones y eso permite conexiones en muchos niveles. Finalmente, tenemos con qué competir y trabajar en cualquier parte del mundo. A veces subestimamos nuestra educación simplemente por ser colombianos. 

Con una campaña para recoger fondos creada por la agencia Publicis, que también ha recibido premios internacionales, la prótesis de LEGO le cambiará la vida a muchos niños. Carlos Arturo Torres es la muestra de que, en innovación, la Respuesta es Colombia.